Los gastos deducibles del alquiler son aquellos que se pueden descontar de la renta anual. Sin embargo, no todos los gastos son deducibles. Hay una serie de requisitos que deben cumplirse para poder beneficiarse de esta deducción. En este post vamos a explicar cuáles son esos gastos y cómo se pueden deducir. ¡Sigue leyendo si quieres saber más sobre esto!
¿Cuáles son las gastos deducibles del alquiler?
Los gastos deducibles del alquiler son aquellos gastos que se han incurrido en la actividad de alquiler. Esto quiere decir que, para poder beneficiarte de esta deducción, debes ser un arrendador y haber incumplido los gastos en el alquiler de tu propiedad.
Tributos
Los tributos son otro gasto que se puede deducir del alquiler. Se trata de los impuestos que se pagan por la propiedad y que están relacionados con el alquiler. Algunos de estos tributos son:
-El impuesto de bienes inmuebles (IBI).
-El impuesto de plusvalía municipal.
-El impuesto sobre el incremento del valor de los terrenos de naturaleza urbana (IVTNU).
Gastos de Seguros
Los gastos de seguros son deducibles si están relacionados con el alquiler de la propiedad. Por ejemplo, si tienes un seguro de responsabilidad civil que cubre los daños que puedan ocasionar tus inquilinos, este gasto será deducible.
Gastos de reparación de la vivienda
Estos gastos son deducibles si se han incurrido en ellos con el fin de mejorar la vivienda o de arreglar algún desperfecto. Por ejemplo, si gastas dinero en arreglar una fuga de agua o en pintar las paredes, podrás deducir estos gastos.
Gastos de comunidad
Los gastos de comunidad también se pueden deducir del alquiler. Se trata de los gastos que se pagan por el mantenimiento y la conservación de la propiedad en una comunidad de propietarios.
Amortización del inmueble
La amortización del inmueble es otro gasto que se puede deducir. Se trata de la cantidad que se gasta en la adquisición o en la mejora de la propiedad. Esto quiere decir que, si has comprado una casa hace poco o si has hecho alguna mejora en ella, podrás deducir estos gastos del alquiler.
Intereses del préstamo hipotecario
Los intereses del préstamo hipotecario también se pueden deducir. Se trata de los gastos que se han incurrido en el pago de la hipoteca. Esto quiere decir que, si has pedido un préstamo para comprar la casa o para hacer alguna mejora en ella, podrás deducir estos gastos.
Algunos ejemplos de otros gastos deducibles del alquiler son:
- La comisión que se paga al agente inmobiliario por gestionar el alquiler.
- Los gastos de limpieza y mantenimiento de la propiedad.
- Gastos de energía eléctrica y agua
¿Cómo se pueden deducir los gastos?
Para poder deducir estos gastos, debes presentar la declaración anual de la renta. En ella, se debe especificar el importe de los gastos deducibles y se debe adjuntar una copia del justificante correspondiente.
Es importante que guardes todos los justificantes durante todo el año, ya que, de no hacerlo, no podrás beneficiarte de esta deducción.
¿Qué gastos NO son deducibles?
Hay gastos que, aunque sean necesarios para el alquiler de la propiedad, no se pueden deducir. Son aquellos que no están directamente relacionados con el alquiler o con la vivienda en general.
En resumen, los gastos deducibles del alquiler son aquellos que se han incurrido en la actividad de alquiler y que cumplen los requisitos establecidos por la ley. Si quieres beneficiarte de esta deducción, debes presentar la declaración anual de renta y adjuntar los justificantes correspondientes.
Gastos deducibles por el inquilino
En el caso de que seas inquilino, hay gastos que también se pueden deducir. Algunos ejemplos de estos gastos son:
- Los gastos de mudanza.
- Los gastos de limpieza y mantenimiento de la propiedad.
- Los gastos de seguros.
Para poder deducir estos gastos, debes presentar la declaración anual de renta y adjuntar los justificantes correspondientes. No olvides guardarlos durante todo el año. ¡Esperamos que este post te haya sido útil! Puedes encontrar respuesta a muchas otras cuestiones que quizás te interesen haciendo click aquí.
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